viernes, 13 de marzo de 2015

CUANDO YA NO TE INDIGNAS POR NADA

Ayer renuncié al laburo, al único estable que tenía. Renunciar es una forma de decir, al fin y al cabo ellos mismos indujeron mi renuncia y por lo que me pagaban al cabo que ni me importa.
Me preocupa que, los negocios educativos, ante la eventualidad, opten por material poco calificado para impartir conocimiento, me preocupa que las próximas generaciones de periodistas salgan vacíos de conocimiento académico. Me preocupa que la gente no compare currículum y se quede con la opción más barata, aunque ya era algo que me lo veía venir. Al fin y al cabo, siempre hay traidores y lobos vestidos de corderos.


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